"Qué barbaridad!"

Como corolario al post anterior estuve leyendo el Blog de Mal Elemento y me dió cierta sensación de tristeza ver que mas allá de que los periodistas son un grupo de gente a los que les encanta hablar de ellos mismos como panopinadores de prestigio, que al fin y al cabo es un defecto que tenemos todos en mayor o menor medida, comienzan a ponerse en posturas francamente reaccionarias. Cada vez mas la ideología que destilan se acerca a la de Mirta Legrand y me encantaría que fuera un chiste, pero no. Hablan desde una superioridad moral "natural" que asusta. Intentan desesperadamente captar un genero que detestan (para atrapar publico-lectores - la logica del mercado-?, para seguir teniendo la seguridad que se entiende el fenomeno?).

Buscan en sus experiencias algo que les permita "vivenciar" el "fenomeno" y sacan a los Redonditos de Ricota, una banda que es probable que llegó a ser masiva por un deterioro en su mensaje y por azar. No tienen nada que ver, seguramente, con La 25. Y la 25 no le connota lo mismo a un fan que Callejeros. Es inevitable que las sutilezas de los grupos sociales alrededor de cierta musica se pierdan cuando uno no pertenece a ellos.

Pero la forma en que se acercan es , posta, la de la vieja que se queja de los cartoneros, o, para decirlo mas suave, la de una generacion anterior. Como un "Piazzolla no es tango" o un "El rock es ruido". Se mezclan los objetos (la musica, lo economico, lo social) y se llega a una posición en donde se termina parado en el techo de la casa de clase media disparando a todo lo que se mueve.

O peor, diciendo que hace treinta años estábamos mejor. Siempre esto de estar mejor o peor depende de quien lo mire. A mí, que tengo un plato de comida todos los dias, un Estado fascista se me ocurre muchisimo peor que una crisis economica. Quizas alguien que basa su libido social en los logros materiales, prefiera una sociedad dominada por el terrorismo de Estado y el "deme dos".

Mi intención no es a su vez ponerme en panopinador (me gustó el neologismo, disculpen) de la prensa "especializada" (que , por otro lado leo muy de vez en cuando en su forma de diario y casi nunca en su forma de revista). Simplemente que no termino de asombrarme de que gente que era (y supongo que es) macanuda en una charla en persona, se transforme poco a poco en eso.

Es un post sobre la lucha por no terminar siendo lo que uno odia. Algo típico de quien se va adentrando en los 30 :)