El arte de boludizar

Hay veces que el marketing cultural se pone al servicio de alguna idea mas o menos interesante. Houllebecq, por ejemplo. Pero la mayoria de las veces, está al servicio de la boludez. El concepto de boludez lleva consigo la superficialidad, la no-critica y la alienizacion mas estúpida. Bueno, casi que todo esto podría ser la definición del suplemento "juvenil" de Clarin. En su edición del 23 de noviembre de 2001, hay una nota (en realidad es un enredo pésimamente escrito) sobre los blogs. Los que no conocen de que se trata, siguen sin saberlo, y los que estamos al tanto de la existencia de estos "diarios intimos" (puaj! que falta de originalidad!) terminamos de leer la nota preguntandonos si es en serio o es un ejercicio mal hecho en en un taller de periodismo. Pero bueno: ya saben, lo importante son los titulos. Si profundizamos , aunque sea minimamente, corremos el riesgo de ahogarnos. Y es que estos pequeños burgueses que escriben en los medios masivos.. ya saben, toman menos riesgos que Bilardo en los ultimos cinco minutos de un partido que va ganando 1 a 0. Mientras puedan entrar gratis al Grand rex y les lleguen sus discos de promocion, están hechos. Y la palabra final la tiene un egresado terciario de marketing que les dice : los jovenes de ahora tienen computadoras, hay que hacer notas sobre la "vida digital".